La Historia...

Me encanta hacer una entrada extra, pues como les contaba al inicio del mes, quería relatarles un poco de mi historia de amor, a propósito de cumplir un año de haberme casado por lo civil con mi amado. 

Esta fotografía me encanta porque están nuestras mamás, nuestros hermanos y mi tío y su esposa, quisimos que nos acompañaran porque son una pareja ejemplar, que llevan mil años de casados jejeje y a quienes se les ve realmente el amor, ese amor que dura toda la vida... Por eso quisimos honrarlos como invitados a esta pequeña ceremonia. 

Nosotros pensábamos que la boda civil era algo de protocolo, solamente un requisito para nuestra boda religiosa, a decir verdad ese día llegamos juntos, no lleve ramo ni argollas solo nos pusimos “bonitos y gorditos” y a las 3:30 de la tarde dimos el sí ante el estado colombiano, cuando el juez leyó todos los compromisos que adquiríamos al contraer matrimonio, nos sorprendimos un montón y nos dimos cuenta que tuvimos una visión muy relajada al respecto jejeje, en realidad ya nos sentiamos casados, sin embargo solo empezaríamos a vivir juntos un mes después (si, ese día cada uno para su casa), fue una ceremonia muy linda, estuvimos muy nerviosos porque no sólo fue firmar un documento sino entender el valor que dentro de nuestra constitución y visión del país, tiene el matrimonio y no es cualquier cosa, solo que a la gente se le ha olvidado el gran valor que tiene y hay un estigma respecto a este tema por muchos imaginarios colectivos y por supuesto malas experiencias de otros. 

En esta entrada quería contarles toda mi historia de amor, pero sería muuuuy largo, mejor de a pocos les iré relatando todo lo que he aprendido de la relación con mi esposo y de todo lo que Dios ha hecho por nosotros. 

Solo para resumir, fue un día hermoso, logramos que fuera un mes exacto antes de la boda religiosa, y aunque a algunos invitados los alcanzó la lluvia y mi esposo tuvo que correr del trabajo para lograr llegar a tiempo, fue muy especial porque luego pudimos compartir un rato reflexionando acerca de todo lo que él juez dijo (pues de verdad nos marcó), mi invitación con esta entrada es que no nos dejemos llevar por las experiencias malas de otros pues por un lado, somos nosotros quienes tomamos las decisiones de nuestra vida, y por el otro cada uno tiene su propia historia no todo lo que le ha pasado a los demás me va a pasar a mi, no hay que creer toooodo lo que nos dicen, hay que pasar por las experiencias para tener un criterio, estoy por cumplir una año de casada y no me ha ido para nada mal, pero de eso les hablaré en una próxima oportunidad.